Pedí el turno una semana antes y especifiqué que quería una profesional en particular porque siempre me atiendo con ella. Al llegar, puntualmente, me dijeron que esa profesional no me podía atender porque estaba haciendo peluquería. Cuando reclamé me dijeron que ella era también peluquera y que en la semana habían surgido imprevistos. Nadie me avisó de esto. Si bien finalmente pude atenderme con la profesional que yo quería, Fabiana me trató muy mal y me respondió de muy mala manera.