Si eres de los que va al gimnasio a diario, ¡este es tu post! Y es que el masaje deportivo es exactamente lo que necesitas para mejorar tu rendimiento a la hora de hacer ejercicio. Mezclando las técnicas del masaje sueco y del shiatsu, este tratamiento te ayudará a eliminar los dolores localizados y hará que te sientas (casi) como nuevo.
Así que prepárate para decir adiós a esas agujetas y dar la bienvenida a un cuerpo más flexible y con mayor resistencia. ¿Preparado para conocer todas las ventajas del masaje deportivo? ¡Allá vamos!
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1 1. Ayuda a aumentar tu flexibilidad
Durante un masaje deportivo se presionan los puntos problemáticos localizados para trabajar tus músculos en profundidad. Estirarlos a ese nivel ayuda a extender sus fibras, relajándolos y haciendo que disfrutes de una mayor flexibilidad. Ideal para tus clases de yoga.
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2 2. Contribuye a acelerar tu recuperación
Un masaje deportivo puede ayudarte a volver al gimnasio más rápidamente después de un tirón muscular. Durante el tratamiento, los poros de las membranas del tejido muscular se abren, lo que contribuye a eliminar el ácido láctico acumulado y a dejar entrar nutrientes y oxígeno fresco para acelerar su recuperación.
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3 3. Mantiene las lesiones a raya
Los masajes deportivos aumentan la elasticidad de tus músculos y pueden incluso cicatrizar tejidos dañados. Cuando te relajas, tu grado de movilidad es mayor, lo que reduce las posibilidades de sufrir lesiones. Y es que, como bien dicen nuestras santas madres (siempre tan sabias), ¡más vale prevenir que curar!
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4 4. Ayuda a mejorar tu resistencia
Si tu última visita al gym te ha dejado el cuerpo fino, ¡únete al club! Un masaje un par de días antes de hacer ejercicio aumentará tu flujo sanguíneo y te aportará una dosis extra de oxígeno para que aguantes más. ¡Y no habrá nada que te pare!