Amigo, que no hayas hecho una maratón en tu vida (y no, ver sin parar la última temporada de tu serie favorita no cuenta), no significa que no puedas hacerte un masaje deportivo. De hecho, cualquiera puede disfrutar de este tipo de tratamientos. Ya seas un amante del gimnasio como si eres más de mantita, sofá y Netflix.
Y es que los masajes deportivos tienen un sinfín de beneficios. Que no te engañe su nombre. Aunque no hagas deporte, no dudes en probar uno. ¡Y ya verás cómo tu cuerpo te lo agradece!
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1 Masajes como alternativa al paracetamol
¿Sufres unos dolores de cabeza monumentales? Pues entonces te gustará saber que los masajes hechos directamente con las manos pueden reducir las cefaleas de tensión crónica. Mucho mejor que llenarse el cuerpo de pastillas. Y no solo eso, sino que también los masajes pueden reducir el estrés, uno de los principales causantes de los dolores de cabeza por tensión.
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2 Pueden aliviar dolencias en tejidos blandos
¿Te duelen más los brazos o las piernas? Entonces estos masajes también son para ti. Perfectamente diseñados para tratar las dolencias de los tejidos blandos (como piel, músculos o tendones) causadas por actividades repetitivas.
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3 Porque tal vez un día llegues a ser atleta profesional...
¿Y por qué no? Con los masajes deportivos y el efecto que hacen de amasar los músculos (conocido como "petrissage"), vas aumentando cada vez más tu movilidad y flexibilidad, independientemente de tu forma física y tu estilo de vida. Así que si algún día tenías pensado hacer más ejercicio que esa maratón de Netflix, el masaje deportivo te habrá ayudado a conseguir tus objetivos. ¿Te animas a probarlo?