Has pronunciado alguna vez las palabras: “necesito un masaje”? Bueno, la verdad es que no te iría nada mal uno ahora mismo, ¿eh? Estar todo el día encaramada a un ordenador, o cotilleando las redes sociales todo el día, devorando alguna novel en el Kindle… Todo esto significa que llevas una tensión acumulada tanto en las lumbares como en las cervicales. Normalmente, tener tensionada la parte superior de la espalda suele pasar si haces vuelos de largo recorrido, conduces largas distancias diariamente o estas muchas horas sentada en oficina. Los músculos están tan rígidos de sentarse mal, y en posiciones incómodas, que no es de extrañar que tu cuerpo necesite, como aire que respira, ponerse de nuevo en orden. Ya no son solo los incómodos asientos los que pueden beneficiarse de los efectos restauradores de un masaje, sino también los temibles dolores de cabeza, mejorar la postura corporal, incluso la digestión se ve mejorada con un masaje regular. Es solo una cuestión de saber lo que necesita cada cuerpo para aprovechar al máximo ese precioso y maravilloso tiempo masajístico…. ¡mmm!
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1 Entender los tipos de masajes que hay
Sacar un mejor partido de tus tratamientos significa saber lo que estás reservando. El gran menú de opciones que hay en el mercado en masajes, puede ser lioso o no se puede llegar a entender bien que significa cada uno y en que consisten. Tejido profundo, masaje sueco… ¿Sabes realmente lo que estás reservando?
¡Podrás descubrirlo en este post!
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2 Masaje sueco
Masaje sueco: probablemente el masaje más popular, usa movimientos largos y suaves. Amasa los músculos en movimientos circulares para calmar los nudos y las posibles tensiones, normalmente, se usa una loción para facilitar la relajación.
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3 Masaje con piedras calientes
Masaje con piedras calientes: se utilizan piedras suaves y calientes, y se colocan en unos puntos estratégicos en el cuerpo para aflojar los músculos. El terapeuta aplica presión con las piedras en los nudos. Esto es también ideal para problemas digestivos.
Si te gustan los masaje de piedras calientes, esto te va a encantar.
Si eres un adicto a los masajes, entonces tienes que probar el masaje de hierbas caliente. Administrado en compresas calientes con una carga de hierbas Thai, con un aroma embriagador y aceites que tienen un efecto relajante y estimulante sobre el cuerpo y la mente; mientras calman los músculos doloridos y con exceso de trabajo. Este masaje aromático también induce una profunda sensación de calma y relajación. Te encantará si eres un fan de otros tratamientos de calor como las piedras o conchas de lava, este masaje tailandés ha sido popular en algunas partes de Asia durante siglos y está ganando lentamente renombre aquí por sus muchas propiedades restaurativas. Conocido por su capacidad para aliviar el estrés, combatir la fatiga, mejora la circulación y calma dolores musculares y ligamentos (solo para nombrar unos pocos beneficios).
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4 Masaje de tejidos profundos
Masaje de tejido profundo o deportivo: Como su nombre indica, es un masaje más profundo que apunta a las capas más profundas de los músculos y tejido conectivo y es uno de los favoritos para aquellos que tienen tensiones causadas por actividades físicas.
Si te gusta el masaje de tejido profundo, te va a encantar esto.
Confíe en nosotras cuando le decimos, que un masaje de bambú no es ningún truco. Es tan y tan relajante que con solo un tratamiento te vas a enganchar. Ideal para personas que les gustan los masajes más fuertes y profundos, combinados con aromaterapia y aceites. Un masaje de bambú consiste en rodar un palo de bambú caliente, suavemente por todo el cuerpo, haciendo movimientos largos con un masaje profundo para ayudar a romper la tensión y amasar a los músculos tensionados. Es original de Asia, pero está ganando rápidamente popularidad en Europa. Especialmente ideal para corredores o ciclistas que pueden experimentar tirantez en las piernas y los pies, esta técnica de masaje relajante deja los músculos estirados y calientes. ¿Lo pruebas?
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5 Masaje Thailandés
Masaje tailandés: aplicando presión a ciertos puntos del cuerpo, el terapeuta puede liberar la tensión; y también físicamente extendiendo y moviendo tu cuerpo para dar energía y aumentar la flexibilidad. Una gran opción post viaje para estirar el cuerpo.
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6 Drenaje linfático
Si te gustan los masajes de poca presión y relajantes, esto te va a encantar.
No dejes que el nombre te engañe. Hace que aumente la circulación y desvanece la temida hinchazón. Un masaje de drenaje linfático tiene unos beneficios curativos para salud y ¡propiedades para levantar a cualquiera! Diseñado para ayudar al drenaje de la linfa, que lleva los desechos desde los tejidos y hacia el corazón, esta experta técnica de masaje se basa en realizar movimientos circulares y en espiral para bombear y que la linfa fluya más libremente por todo el cuerpo. Siendo una parte importante de nuestro sistema inmune, el sistema linfático es una red de tubos distribuidos por el cuerpo que drenan líquido desde los tejidos y desemboca en el torrente sanguíneo. Desde una retención de líquidos o las articulaciones hinchadas y celulitis, el cuerpo puede reaccionar de maneras muy diferentes cuando los niveles están desequilibrados.
Este masaje está diseñado para ayudar a gestionar estos fluidos y filtrar las bacterias y otras toxinas del cuerpo utilizando las técnicas especiales y manuales. Está demostrado que también induce a la relajación profunda, así como regenerar las células y relajar el sistema nervioso. Si te sientes débil este nuevo curso, reserva uno de estos masajes ahora mismo y comenzarás a sentir los beneficios tan pronto entres por la puerta…
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7 Y sobretodo, habla con tu masajista
Habla y no sufras en silencio. Dándole a tu terapeuta una breve descripción al principio del tratamiento puede marcar la diferencia entre un masaje decepcionante o caminar hacía tu casa con la sensación de estar flotando sobre una nube. A los terapeutas les gusta saber todos los detalles posibles: si tienen cosquillas en los pies, tus zonas especialmente sensibles o si prefieren mucha presión o menos presión en algunas partes del cuerpo.
Vale la pena recordar, que ningún masaje será igual que el otro. Si odias los sonidos relajantes del mar, díselo, si eres no te convence la iluminación que hay, lo mismo. Asegúrate de que la temperatura está correcta. Conseguir todas las condiciones que necesitas para tu masaje, se convertirá en más curativo, terapéutico y relajante.