Masaje tailandés

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Contrariamente al masaje sueco, el masaje tailandés se basa en la compresión y el estiramiento del cuerpo, en lugar de usar movimientos de masaje. Durante el tratamiento deberá permanecer vestido y el masajista ejercerá presión en diversos puntos, aflojando los músculos y aliviando dolores articulares. ¡Por algo le llaman el “yoga perezoso”!

¿QUÉ ESPERAR?

El masaje tailandés (yoga) es un tratamiento de trabajo corporal que combina la aplicación de digitopuntura y posturas de yoga asistidas y se realiza sobre una colchoneta en el suelo. El masajista utiliza el peso del cuerpo para ejercer una presión rítmica profunda sobre el tejido muscular. Y, si lo desea, incluso puede caminar encima. ‘Nuat boran’ significa ‘masaje tradicional’ y es una combinación de técnicas provenientes de India, China y el sudeste asiático, basada en los principios ayurvédicos. Si bien las sesiones suelen durar dos horas, con el estilo simplificado que se utiliza en Europa pueden ser más cortas incluyendo meditación y mantras, o sin estos. No se utilizan aceites ni lociones y se debe permanecer vestido, mientras el masajista estira, comprime y mueve los miembros, a diferencia del masaje sueco, donde se fricciona.

El enfoque se asemeja al de la reflexología, con la estimulación del flujo a lo largo de "líneas sen" correspondientes a tendones, ligamentos, nervios y vasos sanguíneos.

Lo único que debe hacer es relajarse mientras el masajista trabaja con los pies o las manos, manteniendo siempre alguna forma de contacto. El terapeuta le hará crujir las articulaciones, tirando de los dedos de los pies y las manos con movimientos rápidos y firmes. También movilizará sus articulaciones en diferentes posiciones, que no requieren un grado de flexibilidad particular y, utilizando la fuerza de gravedad, estirará los músculos principales de las piernas y la espalda. Una vez que haya terminado un lado, le pedirá que gire. ¡Trate de no roncar si se queda dormido!

BUENO A SABER

Es preferible llevar ropa suelta, de modo de estar cómodo y sin restricciones de movimiento. También puede proponerle quedarse en ropa interior, para trabajar el cuerpo de manera más directa. Si no se siente cómodo, debe decirlo. Las costumbres occidentales y orientales son diferentes. Si siente pudor, incluso puede probar el “estilo real”, creado especialmente para dignatarios. Aquí, la presión se aplica en zonas que se considera que pueden ser tocadas por simples mortales, según estrictos códigos de conducta. El enfoque se asemeja al de la reflexología, con la estimulación del flujo a lo largo de "líneas sen" correspondientes a tendones, ligamentos, nervios y vasos sanguíneos.

Todos los tipos de masajes pueden aliviar los músculos doloridos, ayudar a relajarse y mejorar el estado de ánimo. El estilo tailandés en particular puede aliviar el dolor temporario, aumentar la circulación y brindar una sensación general de bienestar. Este antiguo tratamiento budista se enseñó durante siglos en el centro de medicina y masaje tailandés de What Pho. No bromee sobre un “final feliz” al tratar con un profesional calificado.


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